
Por Tamara Gojkovic, expresidenta y tesorera del Club Rotaract de Banja Luka, Bosnia y Herzegovina.
Antes de unirme a Rotary, solo había oído su nombre. No sabía nada más. Entonces uno de los asistentes de mi universidad me preguntó si quería unirme a su club. Él advirtió lo activa que era en la universidad y en varias organizaciones no gubernamentales y pensó que Rotaract encajaría muy bien conmigo. Le agradezco mucho que lo haya hecho, porque eso abrió una nueva etapa en mi vida. De eso hace ya casi cuatro años.
Una de las cosas que me gustan de Rotaract y de nuestra comunidad rotaria en mi ciudad es que trabajamos mucho juntos. Nos reunimos al mismo tiempo que nuestro club rotario, en salas contiguas. Tenemos una gran comunicación, colaboramos a menudo, y varias veces al año, socios del club rotario vienen a nuestras reuniones para hablarnos sobre temas como inversiones, negocios, economía y arte.
Una de las cosas que más me gustan de Rotary son los increíbles proyectos que realiza cada día en todo el mundo. A nivel local, nuestro club ayuda en un refugio de animales, dona caramelos a los niños durante las fiestas y, durante la pandemia de COVID, colocó frente a las principales instituciones de Banja Luka carteles para recordar al público que debe mantenerse la distancia física de seguridad. A nivel internacional, donamos fondos para la construcción de pozos en África y para Move for GECAF (Give Every Child a Future) de Rotaract Oceanía. Otra de mis cosas favoritas es la gente increíble de Rotary y Rotaract que no tendría la oportunidad de conocer de otra manera. He conocido a estudiantes y profesionales de los negocios, la medicina, la economía, el arte, la música, la moda, la diplomacia y muchas otras áreas.
El pasado mes de septiembre, en el Global Citizen Live de París, formé parte de un «escuadrón social» organizado por la presidenta electa de Rotary International, Jennifer Jones. La idea era que nuestro grupo de cuatro personas (Mona Mousa, Pauline Amiel, Hanh Minh y yo) se hiciera cargo de las historias de Instagram de Rotary para mostrar la participación de Rotary en eventos mundiales.

Antes del evento, nuestro escuadrón delegó tareas para asegurarse de que estábamos preparados. Nos pusimos en contacto con las Agencias Informativas Multidistritales de Rotaract (AIM), clubes Rotaract y socios de Rotaract y Rotary para difundir información sobre este evento. Mona se encargó de crear los posts y añadir los pies de foto, mientras yo los compartía en las páginas que administro para mi club Rotaract y World of Rotaract. Además, debido a mi pasión por la fotografía, tomé las fotos y los videos durante el evento.
Me enorgullece mi capacidad de organización, algo que desarrollé a través de varias ONG en las que participé antes de unirme a Rotaract. Desde que me afilié a Rotaract, esa habilidad ha evolucionado aún más al enfrentarme a los retos que conllevan los diferentes proyectos. Uno de esos desafíos fue asumir el cargo de presidenta apenas un año después de haber ingresado. Otra de mis habilidades es la organización y gestión de conferencias y eventos masivos en línea con más de 300 participantes, a los cuales tuve que asignar diferentes sesiones de trabajo virtuales. También gestiono desde hace años varias páginas de redes sociales. Estos conocimientos constituyen una combinación perfecta para que me permitió hacerme cargo de la promoción en las redes sociales. Todos los miembros del equipo aportaron algo importante y eso nos llevó a una gran colaboración.
Me ha sorprendido cómo los socios de Rotary pueden seguir estableciendo conexiones tan sólidas durante una pandemia. Al comienzo de la COVID-19, un rotaractiano italiano, quien ahora es un amigo querido, compró una licencia de Zoom y dispuso una sala abierta las 24 horas del día para cualquier socio de Rotaract que quisiera unirse, pasar el rato y sentirse menos aislado durante estos tiempos difíciles. Me uní sin conocer a nadie y no sabía qué esperar, pero no tenía la intención de pasar mucho tiempo. Sin embargo, encontré una comunidad acogedora de personas increíbles, y seguí volviendo.
Desde entonces, se me ha pedido que me haga cargo de esa cuenta de Zoom y que me una al equipo. Estamos organizando charlas todos los domingos, en las que traemos a alguien de Rotaract o de Rotary para que hable sobre un tema determinado. Uno de nuestros primeros oradores fue la presidenta electa Jennifer Jones. También hemos celebrado fiestas todos los sábados con varios DJ, hemos organizado noches de cine, clases de baile, noches de concursos, Zumba, conciertos, capacitaciones y muchas otras cosas. Tenemos casi 900 personas inscritas, y me enorgullece decir que la sala Zoom sigue funcionando varios días a la semana.
Gracias a nuestro éxito, otros clubes rotarios que quieren convertir sus eventos presenciales en virtuales nos han pedido ayuda. Mi increíble equipo técnico de World of Rotaract y yo hemos ayudado a organizar en línea la EUCO (Convención Europea), la MEDICON (Convención Mediterránea), dos REM (Reunión de Rotaract Europa), el teletón Kickout 2020 de Rotaract, la fiesta de clausura de la Asamblea Internacional y mucho más. Aparte de la experiencia profesional, esto nos ha proporcionado a todos nosotros conexiones en todo el mundo. Los participantes del grupo de la sala Zoom se han convertido en grandes amigos, incluso los llamaría mi segunda familia.
Obtén más información sobre cómo Rotary crea relaciones significativas que traspasan continentes y cómo puede proporcionar encuentros significativos a las personas de tu club rotario, descargando nuestra nueva guía de recursos del Plan de Acción.
Sobre la autora: Tamara Gojkovic trabaja como profesora de piano en una escuela de música y cursa simultáneamente dos maestrías: una en teoría musical y otra en pedagogía musical en la Academia de Artes de la Universidad de Banja Luka.